A 50 años del golpe de estado en Chile, Right Livelihood honra a Joan Garcés, abogado contra la impunidad de los dictadores
News 11.09.2023
El 11 de septiembre se cumplen 50 años desde que el gobierno democrático del presidente chileno Salvador Allende fue derrocado por las fuerzas militares dirigidas por el general Augusto Pinochet, en 1973. Con motivo de este aniversario, rendimos homenaje a Joan Garcés, galardonado con el Premio Right Livelihood en 1999, quien ha desempeñado un papel fundamental en la búsqueda de justicia por los crímenes de la dictadura.
Apoyada por Estados Unidos en el marco de la llamada Operación Cóndor, un plan respaldado por la CIA destinado a establecer gobiernos militares en todos los países del Cono Sur del continente americano mediante el uso de la represión y el terrorismo de Estado, la dictadura chilena duró hasta 1990. Pese al reestablecimiento democrático, algunos aspectos clave del régimen represivo se han mantenido, como la Constitución de 1980 y la privatización de los bienes comunes.
Galardonado con el Premio Right Livelihood en 1999, Joan Garcés está estrechamente vinculado a esta historia. Como joven abogado y sociólogo, estudió el caso chileno y se implicó en el proceso político, viviendo en el país entre 1970 y 1973. Fue asesor personal del Presidente Allende y estuvo en el Palacio de La Moneda el día del golpe.
“La etapa en la que yo viví y participé en Chile es el momento de mayor desarrollo en la historia del país”, afirmó Garcés en una conferencia organizada por el Right Livelihood College de Valdivia en 2021. “Fue una fase de expansión. Había una libertad absoluta en todos los terrenos. Entonces, el problema de los derechos humanos se planteaba en la perspectiva económica. Es decir, hay otra dimensión, que son los derechos sociales y económicos. Era un gobierno de transformación, de orientación socialista, desarrollando las libertades y ampliando la democracia en el terreno económico”, explicó.
Garcés también se explayó sobre la oposición a esa transformación social masiva: “Es en esa fase donde se encontraba la evolución histórica de Chile, que fue estrangulada como consecuencia de la interacción por parte de los sectores sociales que se veían afectados por las transformaciones que deliberadamente se estaban llevando a cabo. La articulación de esa fuerza de reacción interna con la del imperio, la fuerza intervencionista de Estados Unidos, que quiso estrangular el proceso de Chile porque veía en él un peligro mayor. No solamente para América Latina, sino también para Europa Occidental, donde era seguido con mucho interés ese desarrollo que Allende llamaba democracia, pluralismo y libertad. Lo que vino después es conocido y es la violación de los derechos humanos. Yo la considero como una respuesta a esa capacidad, esa voluntad de cambio que tenía Chile en ese momento”.
Spanish lawyer @JoanEGarces received the #RightLivelihood Award in 1999 “for his commitment to end the impunity of dictators.”
He was well-acquainted with #Chile as he lived there and was a personal adviser to President Allende until his last day.
What was 🇨🇱 like 50 years ago? pic.twitter.com/5NwvzcTXZg
— Right Livelihood (@rightlivelihood) September 11, 2023
Como único sobreviviente entre los asesores políticos de Allende, Garcés se vio obligado a abandonar el país. Primero fue a Francia, y sólo tras la caída del dictador español Francisco Franco pudo regresar a su España natal. Una vez allí, se dedicó a investigar los crímenes contra la humanidad cometidos por el regimen franquista.
Durante esos años escribió varios libros y artículos, como “Allende y la experiencia chilena” (1976) y “Democracia y contrarrevolución” (1975).
Garcés no sólo desempeñó un rol cercano a Allende durante aquel gobierno, sino que además fue una figura crucial en la detención de Augusto Pinochet en 1998 en el Reino Unido. Cuando el militar visitó Londres en octubre de ese año para someterse a un tratamiento médico, Garcés exigió su detención y extradición a España para ser juzgado bajo los principios de la jurisdicción universal.
El juez español Baltasar Garzón emitió la orden de detención internacional a pedido de Garcés, iniciando un procedimiento judicial por cargos de genocidio, terrorismo y tortura.
Tras cumplir un año y medio de arresto domiciliario, Pinochet fue liberado por supuestas razones humanitarias, en el año 2000. Voló a Chile el mismo día de su liberación, donde murió libre en 2006.
Sobre lo esencial de su rol en la detención de Pinochet, Garcés dijo: “Fue una forma de seguir comprometido. En primer lugar, con mis convicciones personales. En segundo lugar, para contribuir y reivindicar a mis amigos, a mis compañeros de lucha que murieron en este combate y, en general, al pueblo chileno”.
Joan Garcés recibió el Premio Right Livelihood en 1999 “por sus permanentes esfuerzos para ponerle fin a la impunidad de los dictadores”.